21 de septiembre de 2006

"Vuestro amigo el capitán Batriste o Lapriste..."

Pues si, ayer me vi la peli y tengo que decir: ME GUSTÓ.

Me dan igual las críticas, la comparación con el libro (siempre odiosa, siempre faltarán detalles, etc) Pero me pareció muy fiel a la época, de un gran realismo y, además, contando historias de amor (que normalmente no me gustan) haciendo que no me parecieran empalagosas.

En fin, que bastante buena y que me gustó. ¡¡Pardiez!!

18 de septiembre de 2006

Jum, jum, interesante

Dos exámenes hechos, uno aprobado, el otro no se sabe.

Me quedan dos más por hacer y uno espero que caiga (orgánica) y el otro va a ser cuestión de rezarle a la Virgen de la Esperanza porque sino...

No muchas más novedades, la feria mooooola!!

9 de septiembre de 2006

Isidro Montalvo

Buscando un poquito por la Internete, me he encontrado unas bromas telefónicas del gran Isidro Montalvo!

Para los que no lo conozcais es un tipo que hace bromas telefónicas muy buenas, las de dakitú y todas esas o algunas otras en las que se hace pasar por cura, guardia civil o vete a saber qué.

Aquí os dejo la mejor que he visto. Es un audio, asique no es necesario que miréis todo el rato la pantalla. :P

6 de septiembre de 2006

Cuando uno no da para más...

AVISO: Esto es una historia, no hay enlaces y no hay vídeos, asi que Dani y un 50% de la gente que os metéis aquí, ya podéis cerrar (gracias por la visita).

Esto es una mañana de examen que me presento en el aula indicada para ello. Llego con tiempo suficiente y espero un cuarto de hora hasta que den las ocho y media, hora de comienzo del examen. No hay nadie en el aula. Pasan los minutos, me inquieto levemente y salgo para verificar que estoy en el aula correcta. Siguen pasando los minutos, sigo solo y allí no aparece ningún profesor ni ningún alumno. El pánico comienza a apoderarse de mi, pero consigo aplacarlo haciendo puñetas al tiempo que tarareo "po poropopopopó".

El tiempo sigue pasando y ya visiblemente nervioso me acerco a los ordenadores, verifico de nuevo la hora y el lugar del examen. Me vuelvo al aula. Ya han pasado 20 minutos. Me recorro el CTQ buscando alguna cara conocida que me guíe, pero sólo encuentro químicos, biológos y alguna mujer de la limpieza. En un estado de desesperación decido tomar las riendas de la situación y marcho hacia el despacho del profesor.

Toco a su puerta, nadie me abre. Nadie responde. No hay vida. Vuelvo al aula del CTQ y la cosa se vuelve surrealista, ¡las de la limpieza han cerrado el aula con llave! El examen debería haber empezado hace 45 minutos.

No me queda más remedio que meterme en los oscuros despachos de química analítica y preguntar. Una vez allí, un hombre en secretaría, tras explicarle mi estrambótica situación, decide llamar al profesor. Este no responde. Tan sólo su buzón de voz. Mi día comienza a ser patético. He madrugado. Me sabía todo a la perfección y encima he perdido dos días para estudiar otra cosa. Volviendo al tipo de secretaría me pide todos los datos (le faltó una fotocopia de la partida de nacimiento y el carné de la comunión) y me promete que con cualquier noticia del profesor me llamaría, no sin antes decirme funestamente: "Este profesor se encontraba en Argentina, debería haber vuelto ayer".

Visto el panorama me voy a la biblioteca, les cuento esta hazaña a tres transeuntes que por allí había y me vuelvo al piso. Mis padres me recogen y vamos a comprar al Mercadona. Una vez en su interior, suena una melodía. Mi móvil. Es el tipo de secretaría. Me dice que ha logrado hablar con el profesor. No ha podido regresar por culpa del overbooking (¡malditas agencias de vuelo y malditos viajes!) pero que se pondrá en contacto conmigo durante la semana. "Bueno, un final feliz" pensé.

Gran error. A los pocos minutos recibo de nuevo una llamada. El mismo hombre de secretaría. Había sido de nuevo llamado por el profesor. Me dice que estoy aprobado, que todos lo estábamos. Todo ha sido una farsa. La nota del expediente hace referencia a la otra parte de la asignatura, sólo me tengo que presentar a la parte suspensa, no a todo, ¡no a lo que yo me presentaba! Todo ha sido una farsa.

Conclusión: EL CAMPUS VIRTUAL ES UNA MIERDA. y yo, a veces, peco de pardillo

Esa es mi cara tras la segunda llamada telefónica. Sin sentido.

5 de septiembre de 2006

Un gran momento

Casa de Dani. Las dos y pico de la tarde. Cuatro sujetos entre los que me incluyo vivimos este momento:



Tras ello, muchos saltos, muchos gritos y muchos resoplidos. Para mi, el momento clave del campeonato, sin Pau y con toda la tensión de poder hacer algo grande.